“Es un perjuicio tanto para las postas rurales, las escuelas y la misma cooperativa. Para tener una noción, es el equivalente a la reproducción de consumo de 32 casas en un año”, explica Ignacio Mena, quien se despide porque ya debe partir a almorzar a su casa, a unas pocas cuadras de la cooperativa. Durante la tarde, seguirá trabajando en la mantención de la planta junto a Carlos Saavedra, ingeniero de Nasa Genera, que hogaño se encuentra de visita en las instalaciones de Coopeumo en Pichidegua.
El modelo extractivista se ha cliché. Sin embargo, a lo dilatado en la región han brotado experiencias de resistor en las que un Corro de vecinos, cooperativas o comunidades barriales se organiza para producir su propia energía limpia: las comunidades energéticas.
A las múltiples oportunidades y ventajas que ofrecen las comunidades energéticas, habría que sumar su impulso por parte de la administración y un contexto contemporáneo favorable para su expansión, con cambios legislativos (que se han dado y se seguirán dando) y administrativos a nivel europeo y estatal que buscan promover ese tipo de proyectos.
Estaría interesada/o en hacer uso de los espacios facilitados por el Concejo para suceder la Incertidumbre en Alcorisa
Imaginaros que vuestra comunidad de vecinos o un colectivo de vuestro barriada tuviesen el objetivo de beneficiarse colectivamente de las mismas instalaciones de concepción de energía. ¿Os imagináis que supondría este hecho? Pues principalmente un explotación de la capacidad de procreación eléctrica, una mejora en la eficiencia energética y el potencial para administrar la demanda de sistemas de movilidad sostenible en el futuro.
Para poneros en situación, imaginad vuestra comunidad de vecinos, vuestro barrio o un polígono industrial y que todos ellos tuviesen como objetivo principal beneficiarse colectivamente de las mismas instalaciones de concepción u otras medidas situadas en el entorno de website dicha comunidad. ¿Qué supondría? Principalmente un beneficio de la capacidad de concepción eléctrica o térmica, una mejora de la eficiencia energética o un incremento de sistemas de movilidad sostenible, con potencial para un desarrollo de la gobierno de la demanda en futuro.
Esta iniciativa forma parte de la Organización Corporativa de Compensación de Gases de Efecto Invernadero, en la que establecemos criterios medioambientales y sociales para clasificar los proyectos en los que compensar las emisiones que no podemos reducir.
A pesar de que la idea es que este fuera un tesina piloto, una especie de laboratorio en vida Vivo, tanto los investigadores como la comunidad esperan que siga adelante y que lo haga en manos de los vecinos.
¿A qué retos se enfrentan las comunidades energéticas adecuado a sus diferencias con otros actores del mercado?
Frente a las ventajas que ofrecen las Comunidades Energéticas, actualmente se generan una serie de barreras que frenan el crecimiento de este nuevo maniquí energético:
Existe una complejidad a la hora de usar la gobernanza democrática y estrategias de relaciones locales.
El Vivo Decreto define las Comunidades de EnergíFigura Renovables y señala que pueden basarse en instalaciones de cualquier vector energético, siempre y cuando sea renovable.
Suponen una oportunidad para ayudar a los entornos locales a mejorar su relación con la energía y a implicarse en el mundo de las energías renovables y la transición energética.
La fórmula jurídica más adecuada depende de las deyección que tenga tu comunidad y de la legislatura de tu país